Prótesis Dental

Necesitaremos el uso de prótesis dentales cuando hemos perdido gran parte de una pieza dental y es imposible reconstruirla con una simple obturación, o bien hemos perdido la totalidad de un diente o dientes.

Las prótesis dentales también son necesarias cuando se producen defectos que llegan por debajo de la encía, o cuando tenemos un espacio entre dientes.

Hablamos de rehabilitación cuando faltan varias piezas y hemos de realizar puentes, o incluso cuando faltan la totalidad de los dientes y necesitamos reconstruir arcadas dentales completas, siendo el objetivo principal que el paciente pueda recuperar una correcta relación entre ambos maxilares.

Respecto al material de las prótesis dentales podemos diferenciar tres tipos de coronas:

Las coronas de metal: se realizan con una aleación de oro, níquel o cromo entre otros, en la actualidad se usan ya muy poco por sus limitaciones estéticas, aunque tengan gran duración y resistencia.

Coronas de metal-cerámica MFP:
Este tipo de corona tiene un interior metálico, que se recubre con porcelana, semejando el mismo color que los dientes naturales.

Este tipo de prótesis dental tiene limitaciones estéticas, especialmente en dientes frontales, ya que puede producirse una retracción de la encía y sería muy perceptible la unión de este tipo de restauración aunado a que puede presentar un oscurecimiento en el tejido blando debido a la base metálica, de igual forma es difícil también que con este tipo de prótesis dental se pueda imitar la translucidez de un diente natural; definitivamente una opción de gran estética, no lo es.

Corona de cerámica:
Este tipo de prótesis dental no tiene metal y nos ofrece unas prestaciones estéticas excelentes, se utiliza muy a menudo especialmente en la zona frontal.

Actualmente y gracias a este tipo de coronas podemos reproducir el punto de transparencia de un diente natural, casi de una manera perfecta. En la actualidad la cerámica especializada de disilicato de litio ofrece una estética suprema y alta resistencia de igual forma hoy en día las coronas confeccionadas con circonio ofrecen una muy buena estética y extremada firmeza.

Con este tipo de prótesis dental evitamos también que aparezca una zona oscura debajo de la encía, una vez se produzca la retracción de esta, si es que se llega a producir (tal como hemos explicado con las de metal-cerámica).

Además la cerámica es un material totalmente biocompatible, que no provoca prácticamente alergias, por lo que se convierte en una gran ventaja para pacientes alérgicos al metal.

Cuando faltan una o varias piezas hablamos de puentes fijos o prótesis dental fija.
Se preparan entonces los dientes vecinos a la pieza que falta para realizar la corona. Una parte del puente definitivo, que será al menos de dos coronas que funcionarán como pilares del puente, y al menos otra corona que sustituye a la pieza que falta.

El material que podemos usar en el caso de esta prótesis dental puede ser metal-cerámica o sólo de cerámica.

Antiguamente existía la única posibilidad de realizar puentes para sustituir las piezas que faltaban, hoy en día ante el avance de la implantología dental nos permite colocar un diente sin necesidad de tallar los dientes vecinos.

En el caso de que no sea posible realizar una prótesis fija, por no tener el paciente dientes suficientes, pueden realizarse diversos tipos de prótesis dentales removibles, entre las que destacamos:

Prótesis dental parcial removible

Cuando se tienen sólo algunos o prácticamente ningún diente en el maxilar.
Su mecanismo de soporte será mediante los dientes aún presentes y la mucosa oral.

Prótesis dental completa o total se confecciona cuando faltan todos los dientes.
Su mecanismo de soporte es únicamente mediante la mucosa y el reborde óseo (superficie donde se mantenían los dientes), no ofrece un estímulo positivo al hueso y con cierta regularidad se tiene que estar reajustando.

Esta opción de tratamiento tiene el inconveniente de presentar un proceso de adaptación por parte del paciente, muy largo, lento, en ocasiones traumático y en muchos casos ese proceso de adaptación a la prótesis no se produce y el paciente decide no usarlas.

Actualmente suelen emplearse como dentaduras o prótesis transicionales con la finalidad de emplearse únicamente durante un periodo de tiempo determinado y ser cambiada por una prótesis con mecanismos de soporte o retención mediante implantes.

La prótesis dental parcial fija se diferencia de las otras por la calidad, especialmente en lo referente a la fijación en los dientes naturales. La forma más fácil de fijarlas es mediante ganchos (especialmente en el caso de prótesis dentales provisionales), otra forma mejor de fijarlas sería mediante anclajes.

Especialmente confortable como sistema de fijación, son las denominadas prótesis dentales telescópicas.

La prótesis telescópica puede usarse en todos los casos en el maxilar superior incluso sin asentamiento sobre el paladar.

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